Que la paz sea con todos, mi nombre es Elsy Margarita Monterrosa Alvarenga, tengo 60 años de edad y soy sobreviviente de cáncer.
Nací en El Salvador y llegué a Minnesota en el año 2005. Soy maestra de Corazón y profesión y mi pasión es escribir libros para niños y maestros en el área de cómo enseñar y aprender a leer y escribir el español. Mi sueño es de que toda persona que sepa hablar el español sepa leerlo y escribirlo con ortografía y propiedad.
En enero del 2016 acudí a la cita con mi Doctora primaria en la East Side Family Clinic, soy hipertensa controlada, todo estaba bien, sólamente le comenté que había observado un pequeño hilito de sangre en mis heces fecales, por lo cuál me ordenó un examen de heces, en donde descubrieron “sangre oculta” y por ello ordenó una colonoscopia, me preocupé mucho pues no tenía aseguranza.
La Doctora me envió con “Patient navigator specialist” su nombre es Packu para que me orientara en todo lo referente a la colonoscopia y a los programas de ayuda que el West Side posee a través de la Sociedad Americana del Cáncer y de otras organizaciones de ayuda.
La verdad es que, desde que cumplí 50 años de edad me enviaron a hacerme la colonoscopía, pero por miedo y por dejadez nunca fuí a hacérmela, incluso hubo un año que me dieron la cita para el 31 de diciembre y por no tomarme los laxantes mientras los demás comían delicioso decidí no ir…en esta occasion me hicieron comprender y reflexionar sobre la importancia y la necesidad de hacérmela y me hicieron la cita para el 17 de febrero del 2016 en Minnesota Endoscopy Center, iba bien nerviosa porque
se cuentan tantas cosas raras sobre la colonoscopia, por ejemplo que le introducen una cámara para ver por dentro del cuerpo y uno se imagina una cámara Nikon de 35 milímetros con lentes expandibles, uno se imagina el inmenso dolor que ha de producir eso, aparte de la pena…pero bueno, desde que entré me trataron muy bien, me explicaron detalladamente el proceso, aclararon todas mis dudas y me hicieron el procedimiento.
Cuando desperté la doctora me explicó que habían encontrado unos pólipos y una masa y que lo iban a mandar a biopsia, que si todo salía bien no me iban a hablar, pero si algo salía mal me iban a avisar…y así al día siguiente me avisaron que habían encontrado células cancerosas y que me presentara a la clínica de inmediato.
A partir de esa fecha fue una maratón, mi Dra., los “patient navigator” y las trabajadoras sociales formaron un sólido equipo que me acompañó durante mi jornada contra el cáncer, y a partir de esa fecha me dije a mi misma que nunca afirmaría “tengo cáncer” porque al decir “tengo” lo estaba declarando como mi propiedad, así que siempre dije “hay un cáncer en mi colon” pero va de salida, el proceso de eliminarlo ya empezó al descubrirlo.
Enseguida me ordenaron un MRI en el Hennepin Hospital para el 28 de marzo del 2016, y otra vez a las aflicciones porque en Hennepin no había programa que me cubriera, entonces mi equipo
de ángeles vuelven a trabajar y lograron incluirme en el programa Health East del West Side , aquí se une otro Angel el Dr Patrick White del Colon and rectal Surgeries y me programan una cirugía para el 11 de abril la cual fué suspendida, porque al hacer exámenes más profundos descubrieron que el estadio del cáncer era más alto (IV).
Así decidieron enviarme con el Oncólogo Dr. Jossy Mathew y el Radiólogo Dr Ross McBride, con ellos inicié quimioterapia en forma oral y radiaciones diarias del 15 de mayo al 16 de junio del 2016, me dejaron reponerme un poquito, y el 16 de agosto me hicieron una ileonoscopía y me extrajeron los dos ovarios y 15 ganglios, el tejido lo enviaron a biopsia con la feliz noticia de que no encontraron rastros de cáncer….todavía recuerdo la carita feliz del Dr. White, corriendo, bien contento, buscándome por el hospital para darme la noticia.
Luego, volví con el Dr Mathew, el Oncólogo, y dijo que necesitaba mas quimioterapia y que ahora sería en la vena, así el 7 de septiembre me instalaron el Puerto y el 12 de septiembre inicié las infusiones de quimioterapia, entre retrasos y avances según mi cuerpo respondía tuve mi última quimioterapia el 28 de enero del 2017 y el 31 de marzo del 2017 me retirarón la bolsa y cerrarón la ileonoscopía.
Y empecé a recuperarme ya libre de cáncer gracias a Dios, libre de cáncer gracias al Health East y del West Side, libre de cáncer gracias a la guía siempre oportuna de los Patient navigator y la Sociedad Americana del Cáncer, libre de cáncer gracias a los amorosos cuidados de mi hija, libre de cáncer gracias al gran equipo de ángeles a mi cuidado, hubo un momemto en la jornada que tenía conmigo a : mi Doctora primaria, el Oncólogo, el Hematólogo, el Radiólogo, el Cirujano del Colon, el Cardiólogo, la Ginecóloga, el especialista de los riñones, dos trabajadoras sociales, mi patient navigator, sin contar con los adorables cuidados de todo el equipo de enfermería, libre de cáncer gracias a mi fe, mi positivismo y mi perseverancia.
A partir de la última quimioterapia he tenido controles cada tres meses con todos los doctores, me siguen haciendo exámenes de sangre, mamograma, papanicolao, CT scan y hasta la fecha todos han salido bién y no he tenido que pagar ni un centavo por mi tratamiento.
Le debo mi vida a estos programas de ayuda y creo que, es necesario darlos a conocer más, es necesario que quienes nos hemos beneficiado demos testimonio, porque muchas veces por ignorancia podemos enfermar y perder la vida.
Debemos hacer consciencia de que la prevención es la solución, de que la prevención es más barata que el tratamiento y de que la prevención es menos dolorosa que la enfermedad, por eso hay que hacerse los exámenes periódicamente ya que no hay excusas válidas porque son gratis.
Muchas gracias por su atención y por la oportunidad de compartir mi historia, espero que sea de motivación para aprender a cuidarnos mas.
Que tengan una preciosa y bendecida vida.